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  • Foto del escritorRachel en su tinta

Dos mujeres atadas de por vida por un crimen.

Cada seis meses, como un clavo, los empleados de una pequeña sucursal bancaria reciben la desagradable visita de la señora Gondar, una mujer de aspecto miserable y olor corporal insoportable que controla hasta el más mínimo detalle sus millonarias cuentas. Amanda, una nueva oficinista, la atiende una vez. Un mes después de la reunión, la señora Gondar fallece y Amanda se convierte inesperadamente en su única heredera.

La joven, junto a su amante periodista, Enric, inicia una investigación sobre la identidad de la anciana y descubre la historia de vida que unió de por vida a dos poderosas mujeres: los terribles secretos que las devoran, la culpa que las acecha y los tóxicos relación entre ellos que termina en un final inquietante, Amanda no solo heredó una fortuna, también heredó una culpa.

Mi valoración personal:

María Solar es una de la escritoras más vendidas en Galicia. Periodista, presentadora de televisión y coordinadora de Cultura de la Corporación de Radio Televisión de Galicia. Como escritora comenzó escribiendo literatura infantil y juvenil con títulos como Los niños de la viruela. La culpa ha sido la ganadora de prestigioso premio Xerais de novela 2022.

Como bien dice la sinopsis Amanda empleada bancaria recibe la millonaria herencia de la señora Gondar, una casi indigente que cada seis meses acude al banco para ver como están sus ahorros.

Amanda comenzará así una investigación junto a su amante Enric para descubrir quien era realmente esta señora.

La historia nos traslada al 2004 a Buenos aires donde Mirta Gondar nos relata a modo de diario su vida y como conoció a Marcela la amiga que la iba acompañar el resto de su vida. Un hecho que las unirá para lo bueno y lo malo.

El libro se divide en tres partes donde iremos viendo los pasajes de la vida de ambas amigas, como logran sobrevivir a las adversidades y como logran llegar a Argentina e incluso hacerse famosas.

Pero esta amistad es tóxica, Marcela es posesiva y controladora y Mirta toda su vida acarrea una culpa pegada a ella como una segunda piel.

La narración es fluida y los capítulos se suceden rápido ya que quieres saber más de la vida de ambas amigas, pero llegado el punto que Amanda vuelve a coger el timón del protagonismo el ritmo decae haciendo que pierda interés.

Un final que no le encontré sentido alguno, que le falta más información que haga que todo encaje mejor.

En conclusión, un libro que me ha gustado que lo he disfrutado por la parte del pasado de Mirta y Marcela pero que ha quedado un poco deslucido por ese final.


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