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  • Foto del escritorRachel en su tinta

La muerte no olvida un aliento, da igual las veces que nazcas…

Tebas, año 1327 a.C. dinastía XVIII

Selkis, la hija del gran general de los ejércitos del joven faraón Tutankamón, tiene una obsesión, el esclavo Nun. Dueño de sus sueños y sus desvelos, Nun se las tiene que ingeniar para no caer en los Ardiles de Selkis, que aun amándola no puede permitir que la ira de su poderoso padre caiga sobre su familia.


El poder de seducción de Selkis hace que Nun caiga en su red y comentan un acto que repercutirá tanto en la vida de ella como en la de Nun.

La muerte precitada del faraón, el ajusticiamiento de Nun y el castigo impuesto sobre Selkis a desposarse con el capitán de la guardia, Najmint, y unos crímenes en el templo de Amón donde una serie de sacerdotes son asesinados dejando tras de sí una serie de escarabeos, harán que Selkis de un giro a su vida para realizar aquello para lo que está destinada, ser una sanadora.


Con la ayuda de Asmu un viejo médico, Selkis y Najmint descubrirán rodeados de peligros quien se esconde tras la cabeza de chacal y que tiene que ver esa marca de escarabajo que tiene ella en el tobillo con las muertes de los sacerdotes asesinados.


Luxor, 30 de noviembre de 1925

Zaid, arqueólogo adjunto de Howard Carter, teme que la maldición de la tumba de Tutankamón recaiga sobre él. Decidido a escapar del gélido aliento de la muerte, Zaid encuentra unos legajos donde podría anular dicha maldición, pero Selkis siglos después tiene que contar su historia y todo lo que aconteció, y ese ella misma la que le contará a Zaid a través de sus sueños el origen de dicha maldición y si lograron o no atrapar al asesino de los sacerdotes o si algo llegó a nuestros días.


Mi opinión:


En la muerte que respiras Lola nos transporta a la dinastía XVIII donde reinaba el joven Tutankamón. La trama gira entorno a su repentina muerte y en las hipótesis de una de sus posibles muertes. Lola nos crea una magnifica historia sacando a la luz a personajes tan importantes como la mujer del faraón, Anjesenamón o su sucesor Ay.

Un thriller histórico perfectamente tramado, manteniendo al lector en todo momento pegado a sus casi 500 páginas intentando averiguar, quién está matando a los escribas, que secreto quieren proteger o quién se esconde tras la máscara de Anubis. El desenlace es arrastrado durante siglos para que Zaid logre romper la maldición de quien selló la tumba de Tutankamón.

Otro punto que me ha gustado de esta historia es la profesión donde Selkis se instruye llegando a ser de las primeras Senut, o médicas del antiguo Egipto. Con la ayuda de Amsu , seremos testigos de cómo el Senu con sus enseñanzas y el don de ella para la curación, llegará a operar e incluso a realizar una autopsia.

Como punto no favorable diría el personaje de Najmint. El joven capitán, siempre a la espera del amor de Selkis, siendo su guardián desde pequeños en las sombras, y siendo uno de los personajes que más me han gustado, siento que ese final y no quiero destripar nada, no le correspondía.



En conclusión, un libro donde Lola saca su lado más histórico y deja a un lado al romanticismo que nos tiene acostumbrados para crear un libro perfectamente documentado y donde seremos transportados a Tebas y a los días donde el faraón más famoso murió para dejar inmortalizado su mandato y su maldición a lo largo de los siglos.


Porqué la muerte no olvida, y su aliento te puede alcanzar tantas veces como nazcas ¿te atreves a respirarla?




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