Una historia de raíces, amor, odio, venganza y oscuros secretos ocultos al otro lado del océano en una tierra tan desconocida como fascinante; un mundo de cacao, color y sabor, que también oculta sinsabores.
Puri ha heredado dos cosas de su padre: la pasión por el chocolate y una plantación de cacao situada en Vinces, Ecuador, la ciudad conocida como el «París Chiquito». Aunque no ha visto a su padre desde que era un bebé, este le ha dejado una parte de la plantación que poseía. También les ha dejado su parte a los tres hijos ilegítimos que tenía. Tras aprender el arte de la chocolatería de su abuela, la joven abre una tienda de chocolate en su país, pero, deseosa de saber más sobre el origen de su amado chocolate, se lanza a cruzar el océano con su marido, Cristóbal. Sin embargo, hay alguien a quien no le hace ninguna gracia que Puri reclame su parte de la plantación.
Cuando un mercenario enviado para asesinarla a bordo del barco mata accidentalmente a Cristóbal en lugar de a ella, la joven decide vestirse de hombre, asumir la identidad de su marido y descubrir la verdad. Liberada de las reglas que se espera que sigan las mujeres, se enfrentará a otros retos. ¿Quiénes son esos hermanos suyos? ¿Y ese enigmático desconocido que se cruza con ella? Y, sobre todo, ¿quién es el asesino que sigue suelto por ahí?
Mi valoración personal:
Lorena Hughes nos transporta al corazón de Ecuador con La hija española, una novela que mezcla suspense, misterio, odios y traiciones en el paraje exótico y exuberante de los trópicos.
La vida de Puri cambia cuando recibe una herencia del otro lado del océano; su padre que las abandonó cuando ella era una niña le deja parte de un plantación de cacao en Vinces, Ecuador. Tras convencer a su marido de dejarlo todo en su Sevilla natal se embarcan en la que ella piensa la aventura de su vida.
Pero nada de lo que Puri imaginó sucederá, sino todo lo contrario. Un mercenario ataca a Puri abordo del barco y Cristóbal, su marido por intentar salvarla pierde la vida. Puri se pregunta quien ha mandado a este sicario para acabar con su vida y concluye que alguien de esas personas que las esperan no quieren que llegue con vida para reclamar lo que es suyo.
La joven Puri decide que la muerte de su marido no ha de quedar impune y decide vestirse de hombre haciéndose pasar por Cristóbal para pasar desapercibida a los posibles traidores que esperan su llegada, un disfraz que hará que nadie sospeche que es ella y que quedará a salvo mientras investiga quién y porqué han querido acabar con su vida.
Y así Puri acaba conociendo a cada uno de sus hermanos. Angélica una mujer fría de la que sospecha con tan solo conocerla, Catalina la que todos conocen como la santa y Alberto, su hermano sacerdote del que renunció a su herencia por sus votos. Todos ellos junto a Martín el capataz de la hacienda serán la nueva familia de Puri. Un sentimiento de sospecha a cada uno de ellos pero a la vez de tener una gran familia de la que había carecido toda su vida serán los sentimientos con los que Puri se tendrá que enfrentar.
Lorena Hughes ha tejido una historia llena de giros e intriga que me ha mantenido enganchada hasta la última página. Con capítulos cortos contados tanto en presente como en el pasado de los personajes iremos conociendo así a cada uno de ellos de una manera mas profunda.
Con un ritmo ágil y unos buenos personajes, La hija española son de esos libros que no puedes parar de leer y que necesitas saber mucho más de cada uno de los personajes.
¿ y que puedo decir de ese final? Giros inesperados y un final que ha sido un broche perfecto.
En conclusión, descubrir la pluma de Lorena Hughes ha hecho que sin duda la incluya desde ya entre esas autoras que leeré cada uno de los libros que saque. Un libro donde las raíces, el amor y el odio van cogidos de la mano para conjugar en un libro que te transportará al otro lado del mundo junto a Puri para descubrir la verdad. Solo te recomiendo que te pongas cómodo/a te hagas una buena taza de chocolate calentito y te embarques en esta aventura que te garantizo que será tan adictiva como esa taza de chocolate que bebes.
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